Entre los mamíferos solo son ovíparos los monotremas (el ornitorrinco y los equidnas).
Los animales que producen huevos secos que son puestos al aire, como aves, reptiles o insectos, los depositan después de haber seguido un procedimiento de fecundación interna.
Se denomina ovíparos a todos aquellos animales cuyas hembras ponen huevos, así como los reptiles, los anfibios y las aves.
Los modos tradicionales de reproducción incluyen la oviparidad, que se considera la condición ancestral, tradicionalmente donde se generan ovocitos no fertilizados u óvulos fertilizados, y la viviparidad incluye tradicionalmente cualquier mecanismo donde los jóvenes nacen vivos, o donde el desarrollo de los jóvenes es protegido por cualquiera de los padres en el interior o sobre alguna parte de su cuerpo.
Dichas clasificaciones son en gran medida por conveniencia y, como tales, pueden ser importantes en la práctica, pero hablando en contextos en los que la distinción no es relevante, es común agrupar ambas categorías como "ovíparas".