En algunas sociedades y en algunas gestiones, dichas normas podrán ser seguidas estrictamente; en otros, pueden ser poco más que un formalismo vacío.
La experiencia práctica demuestra que ninguna organización está íntimamente ligada a reglas únicas: en cambio, todas las organizaciones reales representan algunas mezclas de formal e informal.
Pero en las sociedades modernas, las estructuras organizativas formales surgen en contextos altamente institucionales.
Numerosos estudios empíricos en la investigación sociológica organización siguieron siempre probándolo con más claridad, en particular durante el movimiento de Relaciones Humanos.
En la opinión de la teoría de sistemas y la cibernética, sin embargo, la organización formal desvanece en el fondo y sólo sirve, si es necesario, para complementar o corregir.