La OIR dejó de funcionar en 1952, cuando fue reemplazada por el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados.
Esto excluía de su campo de acción a un grupo que superaba en número a todos los desplazados de los demás países europeos en conjunto.
Asimismo, debido a desacuerdos entre los aliados occidentales y la Unión Soviética, la OIR solo trabajaría en áreas controladas por ejércitos de ocupación occidentales.
La Organización Internacional para los Refugiados fue aceptada por 18 países: Australia, Bélgica, Canadá, República Popular de China, Chile, Dinamarca, República Dominicana, Francia, Guatemala, Islandia, Italia, Luxemburgo, Países Bajos, Nueva Zelanda, Noruega, Suiza, Reino Unido, Estados Unidos y Venezuela.
Estados Unidos proveyó alrededor del 40% del presupuesto anual de la OIR que ascendía a $155 millones.