Crisis de los rehenes en Irán

[2]​ El Presidente Carter llamó a las víctimas del secuestro "víctimas del terrorismo y la anarquía" y añadió que Estados Unidos no iba a ceder al chantaje.Los rebeldes islamistas dijeron que los ciudadanos cautivos serían liberados únicamente a cambio de la extradición del Sha a Irán para ser juzgado por "crímenes contra el pueblo iraní" en consonancia con las palabras del líder islamista, el ayatolá Jomeini, clérigo islamista chiita de línea dura, con una retórica fuertemente antiestadounidense, denominando repetidas veces al gobierno estadounidense como "el Gran Satán" y "el enemigo del Islam".Después de su derrocamiento, al Sha se le permitió viajar a los EE.Carter rehusó ceder a las demandas, Jomeini utilizó la situación para consolidar su poder y anular los desafíos del ala moderada de su gobierno, encabezada por su presidente.Carter, en abril de 1980, rompió relaciones diplomáticas con Irán e impuso un embargo comercial, exceptuando medicinas y alimentos.Se propuso bombardear algunas instalaciones petrolíferas de Irán, bloquear el país por mar y llevar a cabo ataques aéreos.Diseñó la operación en dos partes: Un grupo se dedicaría exclusivamente a rescatar los rehenes, mientras el otro realizaría ataques de distracción.Ahí se les unirían ocho helicópteros, procedentes del portaaviones Nimitz en el cercano golfo Pérsico, que llevarían a los comandos -una fuerza selecta de 90 voluntarios- a la capital, donde el aterrizaje y asalto se coordinarían con marines que llegarían en camiones camuflados con emblemas del ejército iraní.Otro grupo saca tres rehenes que tienen separados en el cercano Ministerio del Interior iraní.Una cita en el desierto, a casi 490 km al sur de Teherán era la alternativa.Tres hombres demostraron el 31 de marzo que era posible aterrizar y despegar en ese sitio.Después de descansar durante el día, la Fuerza Delta llegaría con las primeras horas de la tarde a Teherán en camión, desechando la escandolosa llegada en helicópteros que no habría pasado desapercibida.Los rehenes serían liberados por asalto directo y evacuados al estadio de fútbol donde los recogerían los RH-53.Dos AC-130 Hercules permanecerían a la espera, uno de ellos en vuelo sobre el aeropuerto internacional Mehrabad para impedir que los dos F-14 Tomcat allí basados pudiesen despegar y el otro sobre la Embajada, listo para detener cualquier intento acorazado iraní.El aeródromo se habría asegurado mediante una fuerza, con los efectivos de una compañía de los US Army Rangers y estos hombres, junto con los rehenes y la Fuerza Delta serían trasladados a Omán en avión.Un McDonnell Douglas C-9 Nightingale de evacuación sanitaria habría estado a la espera por si se producían bajas.En enero del siguiente año fueron transferidos al Nimitz, que llevaba otros dos.Allí la fuerza recibió otros 13 hombres cuya tarea sería rescatar los rehenes mantenidos dentro del edificio de Asuntos Exteriores.Poco después llegaba un camión que, tras ignorar las órdenes de detenerse, fue destruido por un arma ligera contracarro M72.Mientras se reabastecían de combustible en el desierto, detectaron un problema hidráulico en otro helicóptero.Aunque en el plan original los RH-53D iban a ser abandonados, se decidió no dejarlos en Desierto Uno.Pero los Hercules habían gastado mucho combustible después de permanecer tres horas en funcionamiento.Una pala del rotor principal rozó el fuselaje y lo cortó causando una gran explosión cuyas llamas envolvieron a las dos aeronaves.Todo el personal embarcó en los Hercules y abandonaron los RH-53D, ya que los cisternas no disponían de combustible ni siquiera para incendiarlos.Carter apareció en la televisión y ante todo el país se responsabilizó del fracaso.Tres aviones fueron modificados conforme a un programa apresurado y de alto secreto conocido como Deporte Creíble.Los rehenes fueron enviados a la base aérea de Fráncfort del Meno en la RFA, donde fueron recibidos por el ya expresidente Jimmy Carter (como emisario de la administración Reagan), y desde allí tomaron otro vuelo a Washington D. C., donde recibieron la bienvenida como héroes.En el videojuego Call Of Duty: Black Ops Cold War, las dos primeras misiones consisten en capturar o matar a dos iraníes que tuvieron un papel importante en la crisis de los rehenes.Ahmadineyad era entonces estudiante universitario en Teherán y miembro de la organización estudiantil que planificó la toma de rehenes pero, según su entorno, estaba más preocupado en atacar a los soviéticos que a los estadounidenses.No desempeñó ningún papel en el ataque, y mucho menos en la seguridad».
Protesta en Washington D. C. .
El cartel dice: Deporten a todos los iraníes .
Carter en 1980.
Mahmoud Ahmadinejad.