Marca la aparición final del personaje Mark Greene, interpretado por Anthony Edwards desde los inicios de la serie.
Greene se ha resignado a su destino, luego de ser diagnosticado de un glioblastoma inoperable, y decide renunciar a sus tratamientos de quimioterapia restantes, pasando sus últimos días en Hawaii con sus hijas Rachel y Ella, y su esposa Elizabeth.
A medida que su salud se deteriora, Greene hace las paces con Rachel y le da ciertos consejos finales mientras escucha la canción Somewhere over the Rainbow de Israel Kamakawiwoʻole.
Más tarde se oficia su funeral en el continente junto a sus amigos y colegas del Hospital County General, además de su familia y exesposa.
Su personaje marcó un antes y un después dentro de la serie, lo que se tradujo en el cambio del protagonismo y de las historias del drama médico, además de una consecutiva baja del ráting.