Los cursos subterráneos a veces se calientan por el contacto con rocas ígneas y afloran como aguas termales.
Los pozos artesianos son manantiales artificiales, provocados por el hombre mediante una perforación a gran profundidad y en la que la presión del agua es tal que la hace emerger en la superficie.
Normalmente se clasifican los manantiales o nacientes por el volumen de agua que descargan.
La escala es la siguiente: Los minerales se disuelven en el agua a su paso por zonas subterráneas.
Las fuentes ornamentales, en las ciudades de los siglos XVII a comienzos del XX, solían evocar ese carácter sagrado de los manantiales mediante formaciones escultóricas que representaban a las antiguas deidades del agua.