Las obras del Zuiderzee (en neerlandés: Zuiderzeewerken) son un sistema artificial de diques, drenaje de aguas y posterior recuperación, el mayor proyecto de ingeniería hidráulica emprendido por los Países Bajos durante el siglo XX.
El proyecto consistió en represar el Zuiderzee, una gran ensenada poco profunda del mar del Norte y ganar tierras al mar mediante la creación de pólderes.
Sus principales objetivos eran mejorar la protección contra las inundaciones y crear más superficie para la agricultura.
Aunque hacía muchos años que existían otros planes para la recuperación del Zuiderzee, Cornelis Lely fue el primero, en 1891, en presentar técnicamente un plan que tenía en cuenta las ventajas y desventajas, el impacto económico, el coste del proyecto y los riesgos.
[1] Dos argumentos jugaron a su favor: aunque los Países Bajos se declararon neutrales y no estaban directamente implicados, el estallido de la Primera Guerra Mundial provocó escasez de alimentos; disponer de tierras cultivables habría marcado la diferencia.