Editorial Novaro

Pocos años tras el inicio de operaciones, los cómics comenzaron a ser exportados a otros países en América Latina, incluso formándose asociaciones con firmas editoriales locales que primero distribuían y más adelante reimprimían en sus regiones de influencia.Dado que para muchos niños las historietas eran el primer contacto con la lectura, Editorial Novaro comenzó a editar títulos propios de carácter histórico, científico y biográfico.Estas ediciones tenían varios formatos e incluían historias de personajes del cómic estadounidense a color y fueron muy populares.En la década 1970 la gran demanda de historietas en los países latinoamericanos y en España llevó a la creación de sociedades locales en Perú, Colombia, Argentina y España con guionistas y dibujantes locales, que creaban contenido propio a mayor velocidad que el producido por las editoriales originales en inglés, con esta práctica nace una verdadera subcultura con aventuras inexistentes en otros idiomas de múltiples personajes.En 1985, la editorial decidió que los cómics ya no eran un buen negocio comparado con sus otras actividades editoriales y una parte de sus publicaciones fueron cedidas a otros licenciatarios mientras Novaro se reorientó a otras líneas de productos.Las historietas de Novaro se caracterizaban por su peculiar traducción, que obedecía a dos criterios.Algunos personajes retuvieron sus nombres originales como es el caso de Superman, Batman, Aquaman, Flash, Clark Kent y Metrópolis.