Aunque el avión Northrop Grumman E-8 Joint STARS era un desarrollo reciente, es el último de los modelos basados en el 707.
Instalar los sistemas de alta tecnología previstos para el MC2A en una célula cada vez más obsoleta no proporcionaría la capacidad requerida.
La USAF mantuvo fondos para el radar MP-RTIP y puede ponerlo finalmente en el E-8, o en un nuevo avión, posiblemente la misma célula que el próximo cisterna.
[2] La más pequeña versión del radar AESA MP-RTIP diseñado para ser volado en el Northrop Grumman RQ-4B Global Hawk está siendo probado en vuelo en el avión Scaled Composites Proteus.
Boeing había mantenido el prototipo del E-10 (767-400ER) en Paine Field en Everett, Washington, hasta que fue vendido a Baréin en enero de 2009 para convertirlo en un transporte vip.