Además hay una ficha roja, el Neutrón, compartida por ambos jugadores.
En su turno el jugador debe mover siempre dos fichas, en este orden estricto: Tanto el Neutrón como las demás fichas, llamadas Electrones, pueden ser movidas, en cualquier dirección (horizontal, vertical o diagonal), y en el caso de los electrones es obligatorio desplazarlas lo más posible en la dirección elegida, pero sin ir a ocupar ni saltar por encima de una casilla ya ocupada y para el Neutrón, solo se puede mover una casilla a la vez.
Es decir, que después de elegida una dirección de desplazamiento, la el electrón debe ser movida todo lo posible en tal dirección, hasta quedar su paso bloqueado por otra ficha cualquiera o por el borde del tablero.
Tanto el Neutrón como la ficha propia deben moverse al menos una casilla.
Ganan llevando el Neutrón a su línea de partida