Nuevo Orden Mundial de la Información y Comunicación

[2]​ Presentada en la VI Sesión extraordinaria de la Asamblea General de las Naciones Unidas en 1974, esta iniciativa fue apoyada por la Organización de las Naciones Unidas, encontrando en la Unesco el principal foro a través del que canalizar sus reivindicaciones.

En 1980, una comisión de la Unesco estudió los problemas de la Comunicación en el mundo y produjo un documento — el Informe MacBride — que proponía redistribuir y equilibrar los flujos de información entre países ricos y subdesarrollados.

Algunos de los miembros de la comisión que redactó el Informe Macbride, como Jan Pronk o Mustafá Masmoudi entendían que la NOMIC era parte inseparable de la iniciativa denominada Nuevo Orden Económico Internacional, argumentando que el desequilibrio en el acceso a la información era producto del desigual grado de desarrollo entre unos países y otros.

[4]​ Por tanto, a partir de estas aportaciones teóricas, la NOMIC quedaría ligada inseparablemente del Nuevo Orden Económico Internacional.

En las décadas siguientes, se cedió la gestión del proyecto a la Unesco, integrando primero y sustituyendo después a la NOMIC en su agenda política por otros temas, como la democratización de la comunicación, la sociedad de la información y la inclusión digital.

Armand Mattelart
Armand Mattelart
Jan Pronk
Esteban López-Escobar
Mustapha Masmoudi
Johan Galtung