Pronto actúa contra Alfonso I el Batallador, que amenazaba Zaragoza desde el promontorio de "Deus lo vol" (Dios lo quiere), hoy Juslibol.
Salió a su encuentro y pudo alejarlo hasta Ejea de los Caballeros.
Posteriormente, Alfonso I, muy ocupado por los asuntos castellanos y sus problemas matrimoniales, relajó su presión sobre Zaragoza.
Abdelmálik Imad al-Dawla, el rey destronado, siguió acosando a Ibn al-Hach desde su pequeño señorío de Rueda en el Jalón, pero su acoso no podía ser muy efectivo.
Incluso llevó a cabo una operación junto al gobernador de Murcia, Ibn Aisha por tierras de Barcelona, sufriendo una derrota en el paso del "Congost de Martorell", que las fuentes árabes llaman "Batalla del Puerto" en 1114.