Es muy tímida, pero a veces libera su ira de forma ex para sí misma, hacia su "Otro Yo" interior.
Siempre que intenta decirle sus sentimientos a Fuyuki, la interrumpe alguien y se acabó el romanticismo.
Se reúnen una vez a la semana en la residencia del padre para tomar el té.
Una vez que Momoka no quiso ir, este desplegó todas las fuerzas militares de su compañía llegando a ser el gasto de 12.600 millones, y al final Momoka se quedó con sus amigos.
Tras lo cual, a Momoka se le pasaron los efectos de los datos implantados.