Su desarrollo por la compañía MBDA comenzó en 2006 y debía entrar en servicio sobre las fragatas de la Clase Aquitania FREMM en 2015 y en los submarinos de la Clase Barracuda para 2018.
Desde el tercer ensayo en Biscarosse, todos los objetivos fueron acertados, validando la fase terminal con guía autónoma infrarroja, que asegura una gran precisión.
El Reino Unido que ha colaborado con Francia para el programa SCALP, ha preferido hacer un pedido por 65 Tomahawk americanos.
Este misil no es aún exportado, sin embargo Grecia confirmó en 2010 su interés en comprar 16 fragatas Clase Aquitania, así como 16 misiles de crucero naval.
Por otro lado Egipto y sobre todo Arabia Saudita tienen pretensiones serias de adquirir fragatas Clase Aquitania (una y seis respectivamente), lo que hace suponer nuevas órdenes de compra para el Misil de crucero naval.