Misión jesuítica de La Santísima Trinidad de Paraná
Cada grupo de casa tiene arcos hacia el frente que mira a la plaza.Otro detalle característico, lo constituyen los rosetones de piedra labrada que aparecen sobre los dinteles.Cada cuerpo de vivienda mide 20 metros y está separado del siguiente por una calle.Pudo haber sido el campanario de una iglesia provisoria o una torre tipo atalaya.El friso de los ángeles músicos constituye otra enorme e impresionante pieza.[1] Las paredes aún esconden retazos de figuras y otros elementos arquitectónicos, como las estatuas, todas descabezadas.Contiguo a la Iglesia Mayor se encuentra un calabozo, donde -según historiadores y guías- eran recluidos temporalmente los nativos que quebrantaran las normas de la misión.