[1] Las distintas construcciones que se han ido realizando en su entorno han quitado gran parte de la belleza del lugar, que podía contemplarse no sólo en el propio mirador, sino en las cercanías.
Desde el mirador, puede observarse un tramo del sendero montañoso que, partiendo desde lo alto de Los Valles, desemboca en Cueva Roja y por el cual transitaron a diario, durante la primera mitad del siglo XX, las lecheras que vendían su mercancía en Santa Cruz.
Debían pagar (o esquivarlo) el pago del fielato de Vistabella, impuesto a las mercancías que se les exigía para vender en la capital.
Todos estos medios de transporte también fueron usados asiduamente por las lecheras.
En guagua queda conectado mediante las siguientes líneas de Titsa: