Sus primeros pasos se inclinaban al fútbol, habiendo jugado en el Club Atlético Litoral, hasta que un tío suyo, en oportunidad de que hiciera dos goles, le regalara una bicicleta.
Se inició en el ciclismo con su primo Mario Wynants y con Hugo Nores, ingresando en la categoría novicios.
Integró filas en el Veloz Club Sanducero, Alas Rojas y Nacional, entre otros equipos.
Wynants ingresó a los juegos mediante una invitación ya que no había logrado clasificar en el Mundial B, en Montevideo.
Así, le dio una sorpresa a todos y se colgó la medalla de plata, quedando detrás del español Joan Llaneras y delante del ruso Alexei Markov.