Miklós Jancsó

Durante la década siguiente, el cine de Jancsó fue tendiendo cada vez más hacia el simbolismo y la estilización visual.

En 1968, Jancsó conoció a la periodista y guionista italiana Giovanna Gagliardo en Budapest.

Se trasladaron a Roma, donde Jancsó trabajo durante toda la década, alternando con breves estancias en Budapest.

En 1980 se separó de Gagliardo y volvió a casarse un año más tarde, esta vez con la editora Zsuzsa Csákány, con quien tuvo un hijo en 1982.

Filmada en blanco y negro, con una opresiva puesta en escena, la película ha sido vista como un alegato velado contra la represión tras los sucesos de 1956.

Durante la guerra civil subsiguiente, un grupo de bolcheviques y voluntarios húngaros son capturados por las tropas zaristas.

Consecuentemente, las autoridades soviéticas la modificaron para tratar de resaltar los aspectos más épicos, y finalmente optaron por prohibirla.

Pronto surgen divergencias dentro del propio grupo, y los más moderados son superados por los partidarios de una línea dura contra los seminaristas que se niegan a colaborar.

Sin embargo, recientemente ha empezado a valorarse más este periodo del director.

Estas películas son muy aclamadas entre los jóvenes cinéfilos húngaros debido a su innovación, el humor negro de que hacen gala y la aparición de grupos alternativos o underground.