Miguel Montero Muela

Su obra literaria la forman cuatro novelas y un libro de cuentos infantiles.

En 1973 conoce a la que será su mujer, Mª Asunción Muñoz, y entra en contacto en las vacaciones estivales con el pequeño pueblo natal de ella, Zarza Capilla.

Después llegarían a las librerías sus otras dos novelas, El buscador del silencio (2004) y Claroscuros (2009).

Sus novelas son el reflejo de su curiosidad por conocer las dos realidades del ser humano: la interior (pensamientos, emociones, deseos y sentimientos) y la exterior, captada a través de los sentidos e interpretada por la mente.

Las cosas bien hechas, con amor, la importancia del sol incansable en darnos su luz, el deseo alegre de ver el mar y cómo la unión entre todos nos hace más fuertes, son los ejemplos que se traslucen en tono divertido e infantil.

En esta narración el autor se arriesga buscando un mundo místico, idílico y transformador, a través de profundizar sobre el silencio en todas sus facetas.