Michel le basque

El asalto fue extendido a Gibraltar, que fue incendiada al desatarse una epidemia entre la tripulación.

En esta oportunidad se lleva como rehenes a los notables de la ciudad exigiendo un elevado rescate.

La expedición fue un éxito con un gran botín de unos 20.000 reales, mercancías diversas y 20 prisioneros que fueron cruelmente torturados.

No conforme con el saqueo de Maracaibo, el Olonés mandó un contingente para capturar a las personas que encontraran y que, una vez hechos prisioneros, darían noticias sobre el lugar donde se encontraban ocultos los tesoros ambicionados.

Los filibusteros festejaron grandemente con bailes y juegos, en poco tiempo dilapidaron la fortuna recién adquirida.