El sistema fue presuntamente construido, o por lo menos iniciado, durante la época de Iósif Stalin y fue llamado en código, D-6, por el KGB.
[1] La administración del Metro de Moscú no ha desmentido ni confirmado la existencia de este sistema subterráneo alternativo.
Se conjetura que la longitud del Metro-2 excede a la del Metro público de la ciudad, que posee cuatro líneas, y se encuentra a unos 50-200 metros de profundidad.
En 1994, un grupo de exploración dijo haber encontrado una entrada a este sistema subterráneo.
[3] La línea de Metro-2 desempeña un importante papel en la novela Metro 2033, de Dmitri Glujovski, cuyos protagonistas la recorren en buena parte.