El Tratado de Meerssen se firmó en dicha ciudad en el 870.
A mediados del siglo X, el allodium Meerssen era propiedad de la reina Gerberga, hija del rey Enrique I.
En 968 donó todos sus bienes a la abadía de San Remigius en Reims.
Al finalizar la guerra de los Ochenta Años en 1648 quedó en manos españolas, que la cedieron en 1661 a las Provincias Unidas.
[1][2] También se están celebrando debates sobre la afiliación con otras tres ciudades (Agros en Chipre, Škofja Loka en Eslovenia y Tryavna en Bulgaria).