Mecanismo de Ajuste en Frontera por Carbono

[1]​ Grava la importación de bienes procedentes de fuera de la Unión, para evitar el denominado riesgo de "fuga de carbono" que se produce cuando las empresas con sede en la Unión Europea trasladan la producción intensiva en carbono al exterior, a territorios donde se aplican políticas climáticas menos estrictas que en la Unión Europea o bien cuando los productos fabricados en Europa se sustituyen por importaciones más intensivas en carbono.El mecanismo establecido tiene como objetivo luchar contra el cambio climático pero sin que esta política perjudique la industria comunitaria ni a su vez altere las normas del libre comercio.Al comenzar 2026 se establecerá de forma definitiva.Durante el periodo transitorio los importadores solo deben informar de las emisiones de gases de efecto invernadero incorporadas a sus importaciones, tanto directas como indirectas, pero no tendrán que realizar ningún pago o ajuste financiero.[2]​ Durante este periodo afecta a los siguientes productos: hierro, acero, cemento, aluminio, fertilizantes, electricidad e hidrógeno.