Ingresó en TVE en 1962, sustituyendo a Ana María Solsona en los estudios de Miramar de Barcelona, hasta que en 1966 es trasladada a Prado del Rey, como locutora de continuidad.
Se hizo especialmente popular por su labor en distintos programas de Televisión española durante las décadas de los años 60 y 70, siendo destacado "Club Mediodía", los domingos, con Joaquín Prat, y el espacio para personas con discapacidad auditiva Hablamos.
En los 70 pasó a los servicios informativos, participando en Tele-Revista y en diversos telediarios, sobre todo los del fin de semana.
Esa popularidad le sirvió también para participar en algunas películas de la época como Los subdesarrollados (1968) o El astronauta (1970), ambas con Tony Leblanc.
Se retiró de TVE cuando éste ocupó un puesto diplomático en la embajada española en Viena.