John Paul y Theresa Wiggin deberán enseñarle a su hijo a abrir los ojos y le demostrarán que no es el único miembro listo de su familia aparte de sus hermanos en la lucha frente al más temible enemigo que Peter jamás tendrá, Aquiles de Flandes.
Bean encuentra al doctor Volescu, el que activó originalmente la clave en sus genes, y les prepara nueve embriones para inseminación artificial.
Mientras tanto, sus embriones son robados y Bean cree que Aquiles los usará para amenazarle.
Fingiendo su salida de la estación espacial, Peter y sus padres descubren al traidor.
Sin embargo, Bean ya ha decidido que Aquiles estaba fingiendo y se niega a caer en cualquiera de sus trampas.
Por último, Bean saca una pistola, y con Aquiles suplicando por su vida, le dispara en el ojo.
La novela termina con Peter restaurado como Hegemón, Petra se reúne con Bean, Ali como califa al mando de los musulmanes del mundo, una China muy reducida en territorio y obligados a aceptar condiciones humillantes, pero los ocho embriones siguen perdidos.