Marcos Ramírez de Prado y Ovando

Tomó el hábito de los frailes menores franciscanos en 1601 y cursó la carrera eclesiástica en la Universidad de Salamanca.

Consagrado sacerdote, en las provincias de Córdoba y Granada, realizó varios oficios y llegó a ser vicecomisionario de las Indias.

Fue trasladado a la Diócesis de Michoacán, a la que gobernó 26 años.

En 1643 asistió ejemplarmente a la población indígena en ocasión de peste, y en 1660 colocó la primera piedra de la Catedral de Valladolid, conforme al proyecto de Vicente Barroso de la Escayola.

En 1666, se le cambió a la Arquidiócesis de México, en cuya sede murió poco después sin haber recibido las bulas correspondientes.