Según Marco, su pasión por las artes marciales era tal que no estaba interesado siquiera en tener novia a fin de pasar todo su tiempo libre entrenando.
Pinduka empezó la lucha con patadas frontales, pero Ruas pronto mostró su superioridad en el golpeo y acertó múltiples puñetazos en el rostro hasta que Fernando logró derribarlo; sin embargo, de nuevo Marco probó ser superior en ese terreno también y, atrapando a Pinduka en su guardia, lanzó varios codazos a su cabeza.
Al final, Pinduka pasó su guardia e intentó atacar con puñetazos, pero la defensa de Ruas era demasiado sólida y le impidió causar daño importante.
No mucho después Marco ganó la posición montada y Remco se rindió para evitar sufrir más daño.
De este modo, el lutador alcanzó la final del torneo, donde se enfrentaría al enorme Paul Varelans.
En la primera ronda, Marco eliminó al fiero Keith Hackney por rear naked choke con facilidad, pero en la segunda, el ganador de UFC 6 Oleg Taktarov le ofreció un mayor desafío.
Adentrado el encuentro, Taktarov se mostró más activo, pero sus derribos fueron constantemente contrarrestados por Ruas, quien seguía aprovechando oportunidades y llegó a hacer sangrar al ruso.
Esta lucha contó con la misma dinámica que su anterior encuentro, con Ruas anulando todos los ataques de Taktarov y usando su tremenda ventaja con los golpes para dañarle sin cesar; Oleg, por su parte, era suficientemente resiliente para encajar el daño, por lo que no se produjo ningún KO.
El encuentro finalizó en empate, ya que las reglas de WVC no contemplaban jueces, pero Marco consideró cumplida su venganza al haber dominado completamente a Taktarov, y le estrechó la mano cuando acabó la pelea.
En 1998, Ruas hizo su debut para la promoción japonesa PRIDE en su segundo evento, donde se las vio con el experto en kickboxing Gary Goodridge.
[12] Seguidamente, Ruas asió un micrófono y solicitó una lucha futura contra Rickson Gracie, quien había competido en PRIDE 1, pero no obtuvo respuesta.