Originalmente formó parte de Katsina, un estado hausa del que consiguió la independencia en el siglo XIX.
Tradicionalmente ha sido un centro comercial en la ruta norte desde Kano (Nigeria).
Maradi fue construido sobre una exuberante planicie terrosa, pero tras varias inundaciones, la administración colonial francesa la trasladó a una meseta cercana en 1946.
Se encuentran otras etnias de Nigeria, como la ibo y la yoruba en pequeños comercios y oficios concretos.
La ciudad descansa en una región conocida por el cultivo de cacahuete.