Su esposo tuvo más suerte salvando su señorío de Cheles, ya que a algunos nobles Grandes de España, se les concedió salvar sus señoríos.
En ese momento, María del Pilar cedió a su hijo Cristóbal el único título que tenía en posesión, la baronía del Monte, pasando a ser el II barón de este feudo.
Cristóbal se desposó en 1822 a los 22 años con María Esperanza de Bambalere y Olmos, naciendo tres hijos de esta unión, José Casimiro, Ramón y Cristóbal.
Allí en Navarra, el conde Cristóbal fue apresado por el general carlista José de Zumalacárregui, quién ordenó su ejecución.
En la persona de su nieto y sucesor aún se iban a reunir más posesiones.