María de la Cruz Nault

Esta enfermedad, según ella, le fue curada durante una visita al santuario de Nuestra Señora de Lourdes, en 1930.[1]​ María de la Cruz, luego de su consagración, comenzó a tener diversas experiencias místicas, entre estas destacan los estigmas de Jesús y algunas alocuciones de Cristo en la que le pedía la fundación de una congregación religiosa.El 5 de agosto de 1933, el cardenal Ottaviani le concedió el permiso de reunir algunos compañeros para iniciar la obra y Jules Saliège, arzobispo de Toulouse, les acogió en su diócesis.En 1969 las religiosas tuvieron que trasladar la curia general a Laval.En 1971 dio origen a los Canónigos Regulares de la Congregación de María Madre del Redentor y más tarde, a los Mensajeros de María Madre del Redentor.