Se hizo conocida al principio de su carrera por sus apariciones en las series televisivas Rebelde Way y Chiquititas.
Fernanda continúo su carrera como actriz desde muy joven, debutando a los 14 años en la famosa serie infantil Mi familia es un dibujo, luego siguió Chiquititas, donde actuó desde 1998 hasta 1999.
En 2002 trabajó en la nueva producción de Cris Morena, Rebelde Way, donde hizo dos temporadas, tanto en la televisión como en el teatro.
Poco después fue convocada por el productor Gerardo Sofovich, encabezando junto a la mediática vedette Nazarena Vélez, la obra No somos santas.
En 2011, participó de la comedia Feliz Caño nuevo, junto a Roly Serrano y Rene Bertrand.