Durante la Guerra civil española, Manuel Parada se incorporó a las filas nacionales, aunque nunca fue destinado al frente y desempeñó el puesto de pianista en una banda militar.
Tras la guerra civil, gracias a su amistad con José Luis Sáenz de Heredia, inició su primera colaboración en el cine con la película Raza (1941).
En esta película, cuyo guion había escrito el propio Francisco Franco Bahamonde, no se escatimaron los medios económicos para su realización y Manuel Parada contó con el concurso de los profesores de la Orquesta Nacional, la Sinfónica y la Filarmónica.
Los dos directores con los que más colaboró fueron José Luis Sáenz de Heredia y Rafael Gil.
A partir de los sesenta, emplea conjuntos instrumentales más reducidos e influenciados por la música popular, en concreto por el jazz y el pop.