Maniobra de Ritgen

La Maniobra de Ritgen es un procedimiento obstétrico para la atención de la segunda fase del parto (cuando el feto es expulsado) que tiene como finalidad la protección del periné de la madre cuando la vía del nacimiento es vaginal y en presentación cefálica, pretendiéndose evitar especialmente los desgarros perineales.

Esta maniobra de hace parte de la atención tipo "hands-on" ("manos-en") de la segunda etapa del parto,[1]​ esto es, de aquella atención en la que se manipula el periné, en contraposición a la atención tipo "hands-poised" ("manos-quietas"), en la cual no se toca el periné en ningún momento de dicha segunda etapa.

La evidencia recolectada sobre la utilidad de la maniobra de Ritgen no es clara, por lo que su recomendación como procedimiento de protección del periné materno aún no puede proclamarse o negarse.

[1]​[2]​ Esta maniobra, descrita por Ritgen en 1855, tiene los siguiente objetivos:[1]​[2]​ La maniobra de Ritgen implica el uso de las dos manos (dominante y no dominate): En un ensayo clínico controlado y aleatorizado llevado a cabo por McCandlish y colaboradores en 1998 (muestra de 5741 partos), se comparó la maniobra de Ritgen ("hands-on") frente a no realizar ninguna manobra ("hands-poised"), encontrando que:[3]​ Mayerhofer y colaboradores (2002) compararon en un ensayo clínico casi aleatorizado la maniobra de Ritgen frente a no hacer nada, con los siguientes resultados:[4]​