También se utilizan los nombres mangalitza o mangalitsa para referirse a esta raza.
El mangalica tiene un pelo muy grueso y largo que parece lana en invierno pero que cambia en primavera por unas cerdas ensortijadas, claras y brillantes; solo hay constancia de otra raza porcina con un pelo así de largo, la extinta Lincolnshire Curly Coat.
Muy extendido en el Imperio Austrohúngaro a principios del siglo XX, su número quedó drásticamente reducido tras la Segunda Guerra Mundial.
Monte Nevado, una empresa española inició su cría y recuperación salvando de la extinción segura a esta antigua raza y por ello en 2016 se le concedió la Cruz del Mérito a su director, Juan Vicente Olmos.
En 2006 se exportaron varios ejemplares a Gran Bretaña y desde entonces están registrados en el BPA Mangalitza Herd Book.