Louise Brough

La pequeña tuvo su primer contacto con el tenis en las pistas públicas de cemento existentes en la zona, especialmente en las del Roxury Park.

Su madre le había inculcado ese espíritu, pese a que su imagen era de una joven sin malicia.

Louise llegó a Londres como número uno mundial y debía subsistir con una dieta de 12 libras diarias.

En 1947 fue Doris Hart quien frenó su marcha en el All England Club, pero a partir de ese año Brough fue intocable.

Ganó los tres títulos consecutivos en Wimbledon, al que sumó un cuarto cinco años después, en 1955, ante Beverly Fleitz.

En esa espacio de cinco años, disputó asimismo otras dos finales en al All England Club, en 1952 y 1954 ante Maureen Connolly.

Louise también marco época en los dobles mixtos, ganando ocho Grand Slams y disputando otras tres finales con distintas parejas.

Defendiendo a los Estados Unidos en la Wightman Cup, Louise ganó los 12 partidos que disputó y conquistó el torneo en cuatro ocasiones.