Es una aventura ambientada en varias partes de América Latina en la que se combinan la imagen real y la animación.
El maestro Esperón fue invitado personalmente por Walt Disney, al ver su trabajo y su fama en la industria cinematográfica mexicana, ofreciéndole casa en Los Ángeles y todas las comodidades, mientras trabajaban en la película.
La película, que celebra el décimo aniversario del Pato Donald, consta de siete segmentos, cada uno conectado por un tema en común.
Durante esta parte del documental, Donald aprende sobre el pájaro Aracuan (Pinto Colvig), que recibe su nombre debido a su canto excéntrico.
Al regresar, Donald se da cuenta de que es demasiado pequeño para abrir su tercer regalo.
La película consta de siete segmentos: Durante el segmento Bahía, también participan Robert Ashley, Wesley Carthew, Billy Daniel, Dante DiPaolo, Shep Houghton, Matt Mattox, Harold Miller, Edmund Queenston, Alex Romero y Larry Steers como bailarines, Eddie Foy Jr.
Este doblaje es usado y distribuido en todos los países de habla hispana.
[1] La banda sonora original de la película fue compuesta por Edward H. Plumb, Paul J. Smith y Charles Wolcott.
El coordinador principal Nelson Rockefeller le pidió a Walt Disney que produjera algunos cortometrajes con temas amigables con América Latina, y Disney viajó a Brasil con un equipo creativo para recopilar imágenes y llenarse de ideas para tales películas.
[5][6] La siguiente película importante fue Los tres caballeros, que reunió al Pato Donald, a José Carioca y a un nuevo personaje originario de México: Panchito Pistoles, un gallo revolucionario armado.
Bosley Crowther, por ejemplo, escribió en The New York Times: «Disney y sus compañeros de juego han dejado que sus talentos técnicos se descontrolen».
Incluso podría decirse que una secuencia que involucra al pato, a la joven y a un largo callejón de plantas de cactus animadas probablemente se consideraría sugerente en un medio menos inocente».
El consenso del sitio web dice: «Una de las creaciones más abstractas de Disney, Los tres caballeros es una imagen deslumbrante y colorida que muestra a la compañía en su apogeo artístico».
[10] Cuando México entró a la Segunda Guerra Mundial, muchos de los reclutas del Escuadrón 201 de la FAEM, adoptaron a Pancho Pistolas como mascota no oficial del escuadrón para representar al mexicano en batalla,[13] muchos creen que fue pintado en los aviones mexicanos de la FAEM aunque solo fue pintado en la cola de un avión derribado que pusieron a la entrada del campamento asignado.