Lonja de Finisterre

Se trata de una obra en la que se combinan en 2658 metros cuadrados (de los cuales 1880 metros cuadrados están construidos y unos 778 metros cuadrados son espacio cubiertos por el alero del remate del edificio), un edificio para nueva lonja, el edificio de armadores y oficinas del puerto así como un anexo de instalaciones para servicios relacionados con la actividad que en la lonja se lleva a cabo y su nueva funcionalidad turística, como es el espacio para como la información, exposición de material didáctico o la de control y pequeña tienda.

De esta manera el proyecto compagina la actividad portuaria y las actividades turísticas, intentando recuperar e innovar, al tiempo, el frente marítimo de Fisterra.

[8]​[7]​[5]​[6]​ Para la construcción se utilizaron materiales (vidrio, metal, muros de hormigón, chapa de aluminio; suelos de hormigón pulido, resinas y granito; acero esmaltado e inoxidable para la estructura) y cualidades que permitieran que el edificio tuviera un aire industrial pero al tiempo en él hubiera cabida para integrar lo público.

En uno de los laterales se ubican los espacios destinados a servicios y recepción-tienda.

Por su parte, en la planta baja el perímetro exterior se retranquea para que parte de la cubierta permita realizar actividades portuarias bajo la cubierta del alero superior.