Sin embargo, en poco tiempo, vuelve a adquirir esta resistencia cohesiva una vez que entra en reposo.
El lodo de perforación es una suspensión acuosa de una arcilla especial: la bentonita, este lodo se coloca en las paredes del terreno durante la excavación y sirve para evitar o reducir los derrumbes del terreno.
El fluido de perforación utilizado para un trabajo en particular se selecciona para evitar daños en la formación y limitar la corrosión.
Durante la excavación de la zanja, el lodo va llenándola: al estar en continuo movimiento, tiene poca consistencia, y se comporta como un fluido.
Cuando el lodo bentonítico se emplea en excavaciones, suele servir para extraer los detritus del terreno.