Llave de cruceta

Por ello, el uso de un atornillador neumático tan sólo se recomienda a la hora de soltar la rueda, y no al apretarla, aunque es frecuente apretarlas así por comodidad.

Cuando se recoloca una rueda, se han de apretar los tornillos al principio con la mano, siguiendo un orden en cruz, para presentar correctamente la cara de apoyo de la llanta y centrar los agujeros en los espárragos o en los tornillos.

Tras ello, y al dejar la rueda en contacto con el suelo, proceder a apretar la rueda con llave, aplicando un par de apriete adecuado, nunca excesivo.

Un par de apriete insuficiente puede tener como consecuencia que la rueda se suelte en movimiento.

Debido a esto, es recomendable hacer uso de una llave dinamométrica tan pronto como sea posible.

Llave de cruceta en uso.