El resultando es que al pasar una luz a través de la lámina de litofanía vemos la imagen en claroscuro.
Floreció en el siglo XIX, sobre todo en Alemania y Francia, extendiéndose rápidamente por toda Europa en el siglo XIX.
[1] Actualmente, se producen digitalmente sobre pantallas de polímeros como la poliamida.
Pero también se fabricaron en las manufacturas alemanas de Gotha y Plaue, y en las inglesas de Minton y Copeland, así como en Worcester donde en 1829 se concedió un permiso de fabricación a Grainger Lee & Co.
Hay un museo dedicado a estas piezas en Toledo de Ohio (EE.