El campeón fue Boca Juniors tras vencer en una serie de tres partidos a Estudiantes de Paraná, consiguiendo así su segundo título nacional tras jugar la final en cinco años consecutivos, perdiendo las primeras tres ante el mismo rival (Banco Nación) y ganando las dos siguientes.
[1][2] La brasileña Arianne Tolentino (Boca Juniors) fue elegida la jugadora más valiosa de las finales.
[3] Problemas económicos y de logística determinaron la baja de tres equipos que habían manifestado su intención de participar, entre ellos el subcampeón del año anterior Banco Nación y Bell Ville de Córdoba.
[4][2] Ante la baja cantidad de equipos participantes, las entidades organizadoras (ACLAV y FeVA) diseñaron un formato de emergencia, consistente en cuatro grand-prixs donde los equipos se enfrentaban en un sistema de todos contra todos, para luego pasar a una semifinal y final, en ambos casos al mejor de cinco partidos.
[5] Finalizada la competencia, la organización otorgó las siguientes distinciones:[6]