Constantes peleas, discusiones y altercados por las tierras donde vivían hicieron que su convivencia fuera insostenible.
Cuando este romance llegó a conocerse entre sus familias, no podían comprender lo que sucedía.
Era tan grande el amor de esta pareja que hasta la naturaleza sentía pena por ellos.
Los lobos aullaban y las tormentas cayeron sobre las tierras, esta era la advertencia de los dioses para ambas tribus.
Las lluvias eran cada vez más intensas y acompañadas de truenos y relámpagos asolaron la región hasta que no quedó nadie... Producto de las inundaciones las tribus desaparecieron y en lugar de estas, aparecieron dos hermosos lagos por donde se ha visto pasar en pequeñas canoas a los dos príncipes finalmente juntos.