[1] Frollo debutó en 1948 con una historieta del oeste titulada Sui grandi laghi en el periódico Il Risveglio.
En 1953 comenzó a trabajar en il Corriere dello Scolaro, gracias al historietista Giorgio Bellavitis que lo pone a cargo de las ilustraciones del cuento La strada senza fine.
Entre 1958 a 1968 colaboró a través del estudio de Rinaldo D'Ami con la editorial británica Fleetway, para la que realizó numerosas historietas románticas y bélicas, incluyendo Battler Britton.
En el mismo período, colaboró en la serie de cómics alemana Perry Rhodan.
Al mismo tiempo, crea ilustraciones e historias cortas para las revistas Glamour Magazine y Diva.