En 1929 fichó por el Arenas Club de Guetxo y allí debutaría en Primera División en un Real Madrid 5 - Arenas 2, llegando a participar en un total de 10 encuentros ese año en el torneo doméstico.
Permaneció en el conjunto rojinegro las temporadas 1930-1931 y 1931-1932 en que acabó quinto de la clasificación.
Tras acabar la Guerra Civil se exilió en América donde jugó en River Plate, Peñarol y Real España.
Decidió exiliarse definitivamente en 1939 y se trasladó a Argentina para fichar por River Plate.
Tras su ciclo uruguayo vivió sus últimos días como futbolista en el Real Club España mexicano, una institución que juntó a Blasco, Lángara, Iraragorri, el argentino “Charro” Moreno o los cubanos Ayra y “Romperredes” Tuñas en un excepcional escuadra.
[3] Tras varios años en el extranjero, Cilaurren volvió a España en 1953 y se estableció en Madrid, regentando un bar de estilo vasco.