Mientras jugaba en la Double-A en 1984 se hizo amigo de su compañero Billy Beane, quién más tarde diría que Dykstra estaba "perfectamente diseñado, emocionalmente" para jugar béisbol y que no tenía "ningún concepto de fracaso".
"[1] En 1985 Dykstra, considerado preparado para jugar en las ligas mayores, fue promovido a los Mets cuando el jardinero central titular Mookie Wilson, fue colocado en la lista de impedidos.
La temporada siguiente Dykstra y Wilson rotarían en la posición de jardinero central, pero cuando Mookie sufrió una lesión severa en los ojos durante los entrenamientos de pre temporada, convirtiendo a Dykstra en titular y en primer bateador del equipo.
Dykstra y su compañero Wally Backman, el segundo bateador del equipo, fueron apodados "the Wild Boys" (los chicos salvajes") por su juego poco vistoso, que desentonaba con la alineación llena de estrellas de los Mets.
Con Dykstra como primer bateador, en 1986 los Mets consiguieron fácilmente ganar la división, tuvieron una temporada de 108 victorias y 54 derrotas, y lograron una ventaja de 21.5 juegos sobre su más cercano perseguidor, los Philadelphia Phillies.