Las hijas de Tara

Las hijas de Tara se sitúa en un mundo futuro en el que la tecnología y la naturaleza han dividido a la raza humana.

Mediante productos corrosivos y radiactivos consiguieron hacer retroceder a Mannawinard lejos de sus dumas creando los Páramos, que separaban las ciudades del gran bosque al que tanto temían...

Algunos humanos viven en el bosque y Tara les permite utilizar la magia mediante runas y fuerzas elementales, se llaman salvajes; otros moran en las dumas, donde la biotecnología y la robótica han evolucionado tanto que los hombres ya no lo son del todo y no necesitan dioses que les resten libertad, ya que cuentan con las megacorporaciones que prácticamente controlan sus vidas: son los urbanitas.

Las dumas son ciudades amuralladas y presididas por una Aguja, repetidor de ondas que controla toda la actividad robótica de la duma.

Si esta Aguja se paraliza, los robots y vehículos de la duma quedan inactivos.