Los hindúes (practicantes de la religión hindú) creen que los dioses dejaron libre un cisne con una flor de loto en el pico.
Allí donde el cisne dejara caer el loto, Brahma haría un gran yajña.
El loto cayó en el lago de Pushkar.
El intento de las autoridades por ensanchar el lago y hacerlo más profundo fue infructuoso, resultando en la pérdida del agua del lago.
En octubre de 2009 el lago se secó.