[1] Su coloración le permite un perfecto camuflaje con el sustrato en que vive, la arena seca, al desdibujar su figura mediante un patrón cromático consistente en un fondo ocre salpicado por manchitas claras y series de manchas romboidales oscuras marginadas por un reborde posterior blanco, con pocas máculas celestes y una mancha escapular negra.
Posee hileras de escamas cefálicas que se extienden desde el borde posterior del ojo a la porción posterior de las narinas: son 7 escamas superciliares y cantales unidas, encimadas hasta las narinas, lo que le otorga a su cabeza una conformación acuminada tipo pala.
El ambiente donde vive Liolaemus multimaculatus posee abundante arena seca, expuesta a la intensa radiación solar.
[9] Los médanos vivos totalmente carentes de vegetación sólo los emplea para trasladarse entre biotopos aptos.
Selecciona microhábitats también teniendo en cuenta el grado de compactación del sustrato, pues si no es suelo le es imposible enterrarse.
El zambullido lo realiza de cabeza y con las patas orientadas hacia atrás, penetrando rápidamente gracias a acelerados movimientos en zigzag.
En esta especie destacan subarbustos como Senecio bergii y grandes matas herbáceas de Spartina ciliata.
[11] Allí también construye pequeñas cuevas donde busca protección, deposita sus huevos y regula su temperatura.