Por las noches, Reinier alquila su cuerpo a turistas extranjeros, entre ellos, Juan.
Por el día hace lo único que le interesa en la vida: jugar al fútbol.
También apuesta su dinero buscando un golpe de suerte que le cambie la vida a mejor.
Viven con el padre de ella, Silvano, que es prestamista y también vende ropa de contrabando a chicos como Reinier.
La partida cuenta con buenas actuaciones bajo la dirección de Vanessa Portieles, y el entrenador de actores Yeandro Tamayo, cuyo film tuvo la virtud de abordar esos temas complejos y difíciles con valentía y disposición ante un público de diferentes edades y que no comparten las mismas ideas.