La ciudad de los libros soñadores

Mythenmetz encuentra el manuscrito mientras acomoda y sacude los libros que su padrino le había dejado.

Intentando encontrarlo, Mythenmetz muestra el manuscrito a Hachmed Ben Mirón e Inazea Anazazi, dueños de librerías especializadas.

Cuando despierta se encuentra en un lugar desconocido, y Smeik le explica que sabe demasiado como para dejarlo vivir.

Mythenmetz es salvado por Ojahn Golgo van Fontheweg, quien lo dirige a un sistema de rieles subterráneo hecho por los gnomos oxidados mucho tiempo atrás.

Una vez allí, Homunkoloso, el Rey de las Sombras, cuenta su historia: era un humano, dueño del magnífico escrito que Mythenmetz llevaba en su bolsillo.

Homunkoloso conoció a Arco de Arpa, y éste lo llevó con Smeik, quien aplicó la misma treta del libro envenenado.

Días después Homunkoloso enseña a Mythenmetz como alcanzar el Orm, que es la máxima inspiración.

Al principio Homunkoloso se enfurece, pero luego acepta, con el motivo personal de querer asesinar a Smeik.

Una vez en la biblioteca de Smeik, Mythenmetz y Homunkolso son atacados por cazadores de libros, los cuales son asesinados gracias a los librillos, quienes usaron sus poderes hipnóticos para hacer que se destruyeran unos a otros.